Bardo (o Falsa Crónica de unas Cuantas Verdades), la nueva película de Alejandro Gonzáles Iñárritu, concluye su filmación en México.
Después de cintas como The Revenant, Birdman y la muy celebrada Amores Perros, el cinco veces ganador del Oscar, Alejandro González Iñárritu, regresó a filmar en la Ciudad de México con Bardo, su nuevo proyecto cien por ciento mexicano.
¿Una comedia?
De acuerdo con el comunicado enviado por la productora, Bardo es una «comedia nostálgica» en el marco de un viaje épico.
«Una crónica de incertidumbres donde el protagonista, un reconocido periodista y documentalista mexicano, regresa a su país enfrentando su identidad, sus afectos familiares, la absurdidad de sus memorias, así como el pasado y nueva realidad de su país».
Escrita por el director junto con Nicolás Giacobone, Bardo fue filmada «con sigilo y discreción» en la ciudad de México. La cinta buscará posicionarse como una de las favoritas para la próxima temporada de premios.
Elenco y producción
El elenco cuenta con la participación de Daniel Jiménez Cacho y Griselda Siciliani en los papeles principales. La cinematografía estuvo a cargo del afamado fotógrafo Darius Khondji (Se7en, Amour, Midnight in Paris), mientras que el diseño de producción es de Eugenio Caballero.
En un articulo de Los Angeles Times se muestran algunas imágenes de la filmación en la Ciudad de México, destacando una que muestra a Daniel Giménez Cacho dando un paseo en medio de varios cuerpos huamanos rendidos en el piso con la Torre Latinoamericana como fondo.
Locaciones y curiosidades
Además de la Ciudad de México, Bardo se filmo en otras locaciones como Ahualulco, San Luis Potosí y Baja California.
Con una ambientación noventera, la película cuenta con guiños a estas épocas, exhibiendo anuncios políticos de Carlos Salinas de Gortari y mostrando un pequeño homenaje a series de aquel entonces como La Carabina de Ambrosio y El Chavo del 8.
Bardo es la primera gran producción en nuestro país después del paro de actividades derivadas por la pandemia de Covid-19, colocando a Iñarritu «en la cima del repunte de cine a gran escala en México».