El Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG) celebró su trigésima octava edición durante el 3 y el 9 de junio de este año. La edición tuvo como invitado de honor a Italia, a la actriz Arcelia Ramírez como la persona homenajeada por su trayectoria en el séptimo arte y fue la primera vez que se celebró sin la presencia de su fundador, Raúl Padilla López, quien murió en abril de este año.
En esta ocasión fueron ocho las categorías que integraron la competencia oficial entre las que destacan el Premio Mezcal, Premio Maguey (historias con un componente de diversidad sexual), el Premio Hecho en Jalisco y el Premio de Cine Socioambiental. La gran ganadora del FICG fue Heroico, de David Zonana, que se hizo del Premio Mezcal a Mejor Película, Mejor Actor para Fernando Cuautle, Premio Mezcal Joven (otorgado por estudiantes de cine) y el Premio de la Prensa Internacional.
A continuación un resumen de lo que vimos en el FICG.
Heroico (David Zonana)
En Heroico David Zonana nos presenta la historia de Luis (Santiago Sandoval) un joven que ingresa al Heroico Colegio Militar con la esperanza de convertirse en alguien en la vida y con la convicción de apoyar a su madre enferma a través de la seguridad social que brinda la institución a los familiares de los militares. Sin embargo, Luis es testigo de los abusos físicos y psicológicos de los que son sujetos los jóvenes por parte de sus superiores y de la corrupción que permea en todos los niveles de la institución.
La película de Zonana llega en un momento en el que México ve con preocupación la avanzada de los militares en la vida civil del país y el director muestra en la película los riesgos relacionados con la corrupción y el abuso de poder de una institución que cuenta con la aprobación de un importante porcentaje de los mexicanos. Si bien el personaje de Luis es la llave del espectador a este mundo, es Eugenio Sierra (Fernando Cuautle) en quien cae el peso de mostrarnos el horror del entorno militar. Una gran película, pero sobre todo necesaria, que está proyectada para llegar a las salas de cine en septiembre de este año.
La memoria infinita (Maite Alberdi)
El más reciente documental de Maite Alberdi (El Agente Topo) llegó al FICG luego de hacerse del Gran Premio del Jurado en el Festival de Cine de Sundance. En esta ocasión la documentalista chilena nos presenta la historia de Augusto Góngora y Paulina Urrutia. Ambos son figuras públicas en Chile.
A Góngora se le conoce por haber sido un periodista y presentador de televisión que cubrió la etapa de la dictadura chilena y la transición a la democracia. A Urrutia se le conoce por su trabajo como actriz de cine, teatro y televisión, además de haber sido Ministra de Cultura durante el gobierno de Michelle Bachelet.
Ellos son pareja desde hace más de 20 años en el momento en el que inicia el documental y desde hace años Góngora es víctima del Alzheimer, al punto en que Paulina debe recordarle cada mañana quién es ella y quién es él. La pareja transmite amor y dulzura en la pantalla, pero el Alzheimer intenta destruirlo todo a su paso conforme transcurren los minutos en el documental. Se trata de un relato de amor que encuentra, además, la manera de conectar el tema de la pérdida de memoria de Góngora con la memoria colectiva de la dictadura. Imperdible.
Martínez (Lorena Padilla)
La Ópera Prima de Lorena Padilla, Martínez, se llevó el Premio Hecho Jalisco a Mejor Cortometraje con una historia que funde el drama y la comedia para hablar del retiro laboral de un hombre que le ha entregado tres décadas de su vida a una empresa con presencia nacional. Martínez (Fernando Reyes), chileno radicado en Guadalajara, es un hombre en sus sesentas, gruñón y a quien no le interesa otra cosa que mantener su estricta rutina. Socializar está fuera de su agenda.
Eventualmente Martínez se ve obligado a capacitar a la persona que lo suplirá en el cargo, un joven de la costa opuesto a él y que se gana al resto de los compañeros de oficina. Como es de esperarse, se trata de una pareja dispareja en la que veremos a Martínez dejar sus viejas formas y transformarse con la ayuda de su nuevo compañero. Sin embargo, a Fernando Reyes le cuesta presentar esa transición en pantalla de manera que el público pueda conectar con su personaje de la manera en que la película lo propone.
Mujeres del alba (Jimena Montemayor)
Esta película nos lleva, con una gran sensibilidad y con una preciosa fotografía, a la sierra de Chihuahua en 1965 para contar la historia de la que es considerada la primera acción de la guerrilla mexicana contemporánea. Se trata de la visión desde la perspectiva de las mujeres que vieron a sus familias rebelarse en contra de los abusos y el despojo de compañías madereras en contubernio con los gobiernos locales. Mujeres al alba encuentra la manera de armar un guión de denuncia en el que la imagen potencia la memoria de una historia que parece lejana, pero que marcó la lucha social en México para siempre.
FICG 2023
