Hace unos días, Anonymous filtró un documento en el que se enumeraba a una serie de personajes de la política y el entretenimiento de Estados Unidos, supuestamente relacionados con el empresario Jeffrey Epstein y su red de prostitución infantil.
Nombres como el de Naomi Campbell, Kevin Spacey, Chris Evans (no el Capitán América, sino el conductor británico), el príncipe Andrés, entre muchos otros, se volvieron tendencia en redes sociales rápidamente.
La filtración habría sido suficiente para revivir uno de los casos más espeluznantes de abuso y pedofilia en Estados Unidos, pero que esta ocurriera luego del estreno en Netflix de Jeffrey Epstein: Filthy Rich, hizo que internet se volviera loco.
Poder e Impunidad
Dirigida por Lisa Bryant, consta de cuatro episodios en los que se narra cómo fue que por varias décadas Jeffrey Epstein abusó de decenas de mujeres, la mayoría de ellas menores de 15 años.
Al ver la serie resulta abrumador darse cuenta que todas ellas compartían una característica muy particular (además de su edad); eran vulnerables, provenientes de hogares rotos, de bajos recursos o previamente agredidas sexualmente.
Epstein solía engañarlas con la promesa de que las ayudaría a tener una vida mejor, a cambio formarían parte de una enorme red abuso.
Si esto ya es suficientemente aterrador, la cosa se pone mucho peor, pues por años Epstein operó con total libertad, y esto es algo que la directora deja muy en claro: las autoridades sabían de su comportamiento y poco hicieron para proteger a las víctimas.
Tal era la impunidad que fue hasta la aparición del movimiento #MeToo que surgió una oportunidad real para que las víctimas obtuvieran justicia. Esto ocurrió a medias pues, aunque Jeffrey Epstein fue detenido, nunca llegó a juicio debido a su muy sospechoso suicidio en agosto de 2019.
True Crime: la corona de Netflix
Jeffrey Epstein: Filthy Rich no sólo revela cómo operan este tipo de redes de abuso y tráfico de menores, confirma también que el dinero y las conexiones con gente poderosa (incluido el actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump) pueden ser factores de peso para que las víctimas de estos delitos sean tomadas en serio.
En el caso de Epstein, la riqueza y el poder le permitieron llevar una despreocupada, pero tal vez haya una esperanza de que aquellos que sabían y no dijeron nada, no tengan tanta suerte.
Otra revelación más, con Jeffrey Epstein: Filthy Rich , Netflix demuestra una vez más que lo suyo es esa combinación de documental y true crime. Eso también comienza a ser sospechoso.