Estos diez años estuvieron plagados de directores que definieron no sólo su carrera, también una era. En Filmsteria decidimos realizar un listado, un difícil listado, donde recordamos a los mejores directores de la década.
(ilustración principal: Mariana Zanatta)
Dipping bread in wine, known as Intinction, speaks to the shared Catholic traditions of Russell Bufalino (Joe Pesci) and Frank Sheeran (Robert De Niro). © 2019 Netlfix US, LLC. All rights reserved.
20 – The Wolf Of Wall Street
Dir. Martin Scorsese
Una vertiginosa película en la que Martin Scorsese se guardó las sutilezas para otro momento puesto que no hay otra mejor manera retratar el ascenso y la caída de un hombre venido de la nada y que a base de estafas y operaciones fraudulentas llega a ganar un millón de dólares por semana en el competitivo mundo de Wall Street.
Vemos en la película la vida de excesos de Jordan Belfort y su compulsión por llenar su vida de mujeres, drogas y cualquier cosa que el dinero le permita comprar. La vida de Belfort es también una representación del propio Wolf Street luego de la crisis financiera de 2008: todo es diversión hasta que la cuerda se tensa lo suficiente como para reventar.
19 – Before Midnight
Dir. Richard Linklater
La trilogía perfecta. Un estudio sobre las relaciones afectivas a lo largo del tiempo.
Primero, pongamos el contexto: la trilogía Before, trata sobre una pareja a lo largo de casi 25 años. En las primeras dos, además de conocer a los protagonistas y su amor trunco; en Midnight, nos enteramos que en efecto, permanecieron juntos, pero el amor idílico ha sido sustituido por una rutina que ha desgastado una fantasía con la cual generacionalmente crecimos.
Linklater, como después veremos en Boyhood, juega con el tiempo narrativo y presenta frente a nuestros ojos, la evolución sentimental de una pareja.
18 – The Act of Killing
Dir. Joshua Oppenheimer
El mejor documental de la década pasada. Aquí se presentan, desde el punto de vista de los verdugos, las matanzas cometidas en Indonesia entre 1965 y 1966, donde fueron asesinadas más de 500.000 personas.
A través de entrevistas y recreaciones con estas personas intentamos conocer quienes fueron y qué papel juegan hoy en día dentro de la sociedad. El resultado de este juego de ficción y de recrear la realidad es escalofriante e irónicamente divertido, pues vemos completamente desinhibidos a los responsables de uno de los mayores genocidios en la historia de la humanidad y describiendo con detalles todo lo acontecido.
Un documental perturbador y esencial.
17 – Roma
Dir. Alfonso Cuarón
Dependiendo de la trinchera donde se vea, Roma es muchas cosas: una declaración de guerra (Netflix y las stream wars), un despliegue técnico apabullante, una máquina del tiempo impresionante.
Es una invitación a no olvidar, a pensar el futuro del país a partir de su pasado sin negar ni avergonzarse del “privilegio” de clase media. Es la consolidación de Cuarón como una fuerza creativa que mueve montañas, que recrea escenarios, que llega al Oscar como si nada.
Demuestra, además, que una actuación memorable puede venir de cualquier lado, aunque el talento es de sólo unos cuantos. Claro, estoy hablando de ti, Yalitza.
16 – Whiplash
Dir. Damien Chazelle
Los Oscars de Whiplash por Mejor edición, mezcla de sonido y actor de reparto son completamente merecidos. Aún más, cada uno de estos aspectos son especiales en su realización. Por un lado, la actuación de J.K. Simmons es ya icónica. La abusiva dinámica entre el exigente Terrence Fletcher y el ambicioso Andrew es tan enfermiza como fascinante. Además, la frase “Not My Tempo” resuena desde el 2014 uniéndose al canon de líneas legendarias.
Por otro lado, la habilidad de Chazelle para entrelazar la musicalidad y cinematografía se luce en cada escena que, combinada con una excitante historia de pasión y ambición artística, mantienen a su espectador al filo del asiento desde su primera nota hasta el crescendo final.
15 – Marriage Story
Dir. Noah Baumbach
Baumbach presentó en los últimos meses de 2019, no sólo el mejor trabajo de su carrera, también una forma de aniquilar con nuestras esperanzas de imaginar que el amor puede coexistir en pleno siglo XXI.
A través del divorcio de una pareja de artistas y la lucha por la custodio de su hijo, Marriage Story nos revela la forma en que el egoísmo y el temor a la soledad son más fuertes que los juramentos románticos.
Por otra parte, fue la cereza en el pastel dentro de una década cargada de papeles memorables de los dos protagonistas: Adam Driver y Scarlett Johansson.
14 – Drive
Dir. Nicholas Winding Refn
El antihéroe perfecto de esta década dentro de una fábula sobre la forma en que podemos transgredir y modificar nuestro destino.
Gosling interpreta a un criminal quien al conocer a su vecina, trata de revertir su vida. A través de traiciones, persecuciones de auto y peleas en elevadores, Drive es una mezcla entre una cinta de serie B y un filme existencialista.
Refn nos brinda una cinta de acción estética y llena de neón, chamarras de satin y uno de los grandes soundtracks del género de todos los tiempos.
13 – La La Land
Dir. Damien Chazelle
El musical de toda una generación.
Chazelle con la ayuda de Ryan Gosling y Emma Stone, presentan una pieza llena de color y plagada de homenajes tanto al cine musical, viejo Hollywood y, sobre todo, a Los Ángeles.
Sin embargo, La La Land es una historia sobre los detalles de la vida que fungen como detonadores. Arte, amor, madurez y saber en qué momento soltar aquello que nos sirvió como inspiración. Chazelle confirma que decir adiós es crecer.
Y esa secuencia final y la mirada cómplice entre los protagonistas contiene mayor sentimentalismo que la polémica que generó su derrota en los Oscar.
De hecho, olviden que dije que era el musical de esta generación, es la relación fílmica más relevante de de amor de la década
12 – Inception
Dir. Christopher Nolan
Una película dentro de una película dentro de una película. Inception es la gran pieza de origami de Nolan. Se desdobla ante nuestros ojos y nos asombra, nos fascina, nos intriga. Juega con los planos, con los espacios, con el tiempo.
La camioneta cae lentamente y al mismo tiempo suceden mil cosas. Kubrick y Tarkovsky mirarían divertidos. Como buen mago, el director se guarda el mejor truco para el final.
¿Ese tótem sigue girando?
11 – The Master
Dir. Paul Thomas Anderson
Como todo el cine de Paul Thomas Anderson, esta es una película desafiante, y compleja. Aquí un hombre (Joaquin Phoenix) que regresa de la Segunda Guerra Mundial, alcohólico e inestable, es acogido por el gurú de un culto (Philip Seymour Hoffman), muy parecido a la Cienciología. Ahora maestro y discípulo desarrollarán una relación donde se pondrán a prueba no solo ellos, sino a La Causa.
La película es fascinante como oscura, con una fotografía que destaca y con una música de Johnny Greenwood, su colaborador de cabecera, que nos transporta a la atmósfera onírica y enrarecida que vemos en pantalla
Además las actuaciones son de lo mejor de esta década, especialmente el duelo entre Joaquin Phoenix y Philip Seymour Hoffman (véase el momento del interrogatorio) debería ser considerado como uno de los mejores de la historia.
10 – Get Out
Dir. Jordan Peele
¿Horror? ¿Suspenso? ¿Comedia? ¿Comentario político? Una de las virtudes de Jordan Peele plasmadas en Get Out es su capacidad para redefinir las fronteras entre géneros y entregar una obra que generó conversación no sólo por sus valores como producto cinematográfico, sino por haber encontrado nuevas maneras de abordar un tema que en Estados Unidos se mantiene vigente, incluso en la era post-Obama: el racismo.
En su debut como director, Peele sorprendió al mundo y además logró hacerse del Oscar a Mejor guión original. Lo que pareciera ser una anécdota sencilla del chico que es invitado a conocer a la familia de su novia toma un camino sorpresivo y logra convertirse en una de la películas más memorables, ingeniosas y representativas de la década.
9 – The Grand Budapest
Dir. Wes Anderson
La gran obra de Wes Anderson. Una comedia donde migró de sus mundos de fantasía y desplegó una historia sobre la nostalgia, fascismo y el poder universal del arte para unir personas.
El lirismo visual siguió intacto y en esta ocasión sus colores pastel y la simetría de sus tomas, sirvieron para descifrar una historia de amistad entre dos personajes completamente distintos.
Anderson por primera vez utiliza temas mucho más políticos e incluso podemos decir, en cierta, forma adultos, para confirmar que es uno de los cineastas con mayor imaginación, tanto narrativa como visual, que hemos tenido en esta década
8 – Melancholia
Dir. Lars Von Trier
El fin del mundo es un tema que el cine nos ha presentado cada vez más y más en los últimos años, pero a diferencia de películas de acción y desastre, Melancholia nos muestra un fin del mundo sosegado y reflexivo.
En este filme de Von Trier, el enfrentamiento de sus protagonistas (dos hermanas con una ya complicada relación) no es con el asteroide que está por destruir la tierra sino con sus propias ganas de vivir.
Adecuadamente nombrada, Melancholia pone especial cuidado en sus representaciones visuales y auditivas. Estas no solo crean una atmósfera envolvente, sino también exteriorizan la lucha interna de Justine y Claire, encarnadas por Kristen Dunst y Charlotte Gainsbourg quienes entregan una interpretación fascinante hasta el último momento.
7 – The Social Network
Dir. David Fincher
Quién diría que la historia sobre la creación de Facebook no sólo iba a transformarse en la mejor película de 2019, sino que abriría la década con las obsesiones mediáticas y fílmicas que dominarían estos años: narcisismo tecnológico y el elogio al individuo self made.
6 – The Irishman
Dir. Martin Scorsese
The Irishman es la película más honesta, libre, apasionada y nostálgica de Scorsese. Una obra mayor. Se trata de un minucioso estudio de personaje que además sirve como pretexto no sólo para que Scorsese despliegue lo mejor de su cine, sino para ver juntos -muy probablemente por última vez- a los más grandes capos de la actuación en Hollywood: Joe Pesci, Harvey Keitel, Al Pacino y un Robert De Niro que demuestra, una vez más, por qué es una leyenda viviente.
Se trata del legado de todos estos hombres que por años nos enseñaron qué es el CINE, así, con letras mayúsculas.
5 – Parasite
Dir. Bong Jon Hoo
Parasite o el poder de la metáfora. En un primer vistazo, la ganadora de la Palma de Oro en Cannes 2019 parece una disfrutable pero sencilla comedia costumbrista sobre una familia coreana sumida en la pobreza y la inacción, pero luego, inadvertidamente, pasar de la comedia, al suspenso, al thriller, al terror, para terminar en un doloroso estudio sobre las relaciones entre ricos y pobres.
Férreo defensor del cine de género, Bong Joon Ho se ha convertido ya en uno de los directores más importantes de la década y seguro uno de los más influyentes en los años por venir.
4 – Mad Max: Fury Road
Dir. George Miller
¿El cine de acción puede ser arte? Claro que si. Eso es Mad Max: Fury Road. Es el regreso al cine evento, aquel que sólo se puede disfrutar en una gran sala con una enorme pantalla. Mad Max es un gozo de principio a fin.
El flujo de imágenes, el ritmo de la edición, el manejo de la cámara, los efectos especiales hacen de esto algo que no veíamos en muchos años: la emoción del cine por el cine mismo.
Miller, de 70 años, viene a dar cátedra de cómo se hace una buena película de acción. Aprende, Michael Bay.
3 – Under the Skin
Dir. Jonathan Glazer
Glazer tiene una gran experiencia realizando algunos de los videos más icónicos para cuando MTV todavía pasaba música. Después incursionó al cine con Sexy Beast, Birth y finalmente con Under The Skin. Esta última siendo una especie de experimento cinematográfico de gran belleza y al mismo tiempo visionario, protagonizado por Scarlett Johansson.
Aparentemente sin sentido, y más bien compleja en su narrativa, Under The Skin presenta una crítica al ser humano que debería ser analizada a detalle.
2 – Boyhood
Dir. Richard Linklater
El cine como un escriba del espacio y tiempo específico. Boyhood durante más de diez años, maquiló a una experiencia visual y cultural: Linklater filmó la vida de un chico común y corriente, su familia y su paso a la adultez.
Pero la historia va más allá de retratar el American Way of Life del siglo XXI, así como la mutación generacional de un sociedad.
Jamás se había contemplado un fenómeno fílmico donde el tiempo transcurría de forma emotiva frente a nuestros ojos.
1 – Phantom Thread
Dir. Paul Thomas Anderson
Amor, enfermedad, servidumbre, posesión y entrega. Phantom Thread puede entenderse como un ensayo sobre la compathía: el amor vuelto paraíso e infierno, hechizo mutuo donde el poder de un hombre sucumbirá ante el deseo posesivo de una mujer.
Si todo amor es eucaristía, aquí el sacramento es un ritual que empieza en el desayuno y acaba en un cautiverio suave, vampírico, enfermo, gótico, un odio que se vuelve indistinguible del amor.
La colonización del otro, el hechizo y la servidumbre mutua, “te quiero indefenso y tierno, solo para mi”. El amor como una de las peores enfermedades, porque es justo de la cual no te quieres curar.
¿Cómo realizamos este listado de lo mejor de la década?
Cuatro miembros del equipo de Filmsteria!: Paloma Cabrera, Mariana Pintado, Alejandro Alemán Raúl Orozco y Josué Corro, mandamos un listado de cerca de 150 películas. Durante varias semanas, juntamos los cinco rankings, y realizamos un promedio de final de manera descendente.
Así, si alguna película aparecía en dos listados en el primer lugar, y en otros tres, en número 15; al final su promedio lo colocaba en la octava posición.
Filmsteria! la página de cine con mayor democracia, tanta que Michael Moore debería hacernos un documental.
