El amor se manifiesta de maneras que pueden resultarnos increíbles. Modern Love es la nueva serie de Amazon Prime que, en su formato de antología de ocho episodios, retoma algunas de las más extrañas, emotivas, dolorosas y apasionantes historias alrededor del amor que la columna homónima del New York Times ha presentado a lo largo de 15 años.
La decisión de adaptar para televisión los relatos de una columna cuya aceptación ya ha sido probada, aunado a la decisión de llevar a figuras como Anne Hathaway, Tina Fey, Dev Patel y Andy García para protagonizarlos, parece una apuesta rentable y en varios sentidos lo es, a pesar de que no haya precisamente algo nuevo en Modern Love.
El mismo amor, diferentes historias
Como sucede en prácticamente cualquier antología para cine o televisión, las partes que la conforman no son de calidad homogénea y cada una conectará de maneras distintas y con una mayor o menor intensidad de espectador a espectador.
Eso sucede con Modern Love, pero hasta aquí no hay novedad alguna. Sorprende, en cambio, que el nivel actoral en cada uno de los episodios, protagonizados todos por un reparto distinto al tratarse de historias diferentes, se mantenga a la altura de las expectativas. Ninguno de los actores parece haber ido solo por el cheque.
La serie discute el amor y sus múltiples caras, el amor conocido y el desconocido, el amor al derecho y al revés. Lo mismo presenta historias sobre el enamoramiento a primera vista de un par de jóvenes, que el inicio de una relación en la etapa final de la vida.
Modern Love igual presta atención a relatos en los que sus personajes aman a quien ya conocen desde hace tiempo, que a los que tratan sobre el amor hacia un ser que aún no se conoce, como puede ser el caso de un bebé. Lo interesante de la serie es que no omite presentar el dolor del amor no correspondido o cuando comienza a morir. La tristeza que le acompaña o el cólera que despierta cuando esto sucede.
Modern Love y sus estrellas
Entre las historias con los elementos más convencionales, podrían encontrarse las que protagonizan Tina Fey y Dev Patel. En el primer caso, el matrimonio formado por Sarah (Tina Fey) y Dennis (John Slattery) toma conciencia de que han descuidado su relación al haberse enfocado durante años a la crianza de sus hijos, lo cual los lleva a buscar ayuda para no desmoronarse.
En otro episodio, Joshua (Dev Patel) cree haber encontrado y luego perdido a quien puede ser el amor de su vida y nos presenta la intranquilidad y la insatisfacción que ello implica en su existencia.
Sin embargo, por habituales que pudieran parecer estos relatos, Modern Love encuentra la manera de enganchar al espectador con algunos de sus recursos: el sentido del humor humor, las buenas interpretaciones o las pequeñas sorpresas en la trama.
El amor en los tiempos de Nueva York
Cuando Modern Love mira hacia historias mucho más surreales o lejanas de experimentar, es cuando alcanza sus mejores momentos. Por ejemplo, se encuentra el relato sobre Maggie (Cristin Millioti), una chica cuyas conquistas suelen verse amenazadas por la presencia del portero de su edificio hasta que, por alguna razón inesperada, el desfile de chicos al departamento se ve obligado a cesar.
O bien, la historia de Lexi (Anne Hathaway) una mujer que aparentemente lo tiene todo resuelto en la vida. Cualquier chico se sentiría afortunado de tener una oportunidad con ella. Sin embargo, parece imposibilitada para sostener, o siquiera iniciar, una relación. El momento en cual cual se descubre la razón que aqueja a la protagonista, es una escena visualmente interesante y profundamente dolorosa.
Quizá algunas de las más duras críticas sobre Modern Love, se centren en el hecho de que las historias de la serie se sitúen en una Nueva York de ensueño. Si el amor está idealizado, los personajes también: parecen tener sus asuntos económicos resueltos con holgura, en lo que parecería una burbuja existencial.
Modern Love es una serie con elevados niveles de producción, grandes actuaciones y momentos para suspirar o derramar más de alguna lágrima.