Pinocho, de Guillermo del Toro, es la enésima adaptación del clásico de la literatura infantil de Carlo Collodi. Para estas fechas y después de ver el live action de Disney, otra versión del muñeco de madera parecía soporífero, aunque, pasando por las manos del gran Guillermo del Toro, Pinocho se convirtió en una de las mejores películas del 2022 y un claro referente de la animación mundial.
Homenajeando obras de su propia filmografía y algunas otras referencias, hoy te presento todos los secretos y curiosidades de Pinocho de Guillermo del Toro.
ADVERTENCIA: este texto contiene spoilers.
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Varios personajes en uno
A la hora de crear a los personajes y su psicología, Del Toro necesitaba a un villano único y malévolo, por lo que fusiono a El Honrado Juan, Gedéon y Stromboli en uno solo, dando vida al Conde Volpe.
El peinado y estilo de este villano recuerda a los cuernos del diablo y hay quienes afirman que rinde tributo a Heihachi Mishima del videojuego Tekken, ya que Guillermo del Toro acostumbra jugar con este personaje.
Como dato extra la palabra “Volpe” significa zorro en italiano.
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Carlo Collodi
Como en todas sus adaptaciones, se muestra a Geppetto como un padre que tristemente pierde a su hijo, aunque ahora con un tinte más oscuro y realista al puro estilo de Del Toro. En esta ocasión, el pequeño lleva el nombre de Carlo, un homenaje directo al autor original de la novela, Carlo Collodi Lorenzini.
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La guerra y El Espinazo del Diablo
Las fechas de El Espinazo del Diablo transcurren en el año 1939, recién finalizada la guerra civil italiana al igual que Pinocho, abordando las duras consecuencias de los conflictos bélicos en la población inocente. Sin embargo, las similitudes no culminan ahí. La escena donde en avión militar libera un misil por exceso de carga y este cae en una iglesia, es una calca de un lapso escénico de El Espinazo del Diablo de 2001. Además, en ambas cintas aparecen imágenes de Cristo, estatuas, santos y dormitorios infantiles en un campo fascista.
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Ambientada en la Italia de 1930
La novela original de Pinocho se sitúa en el siglo XIX, pero Del Toro la ambiento en la Italia fascista de Benito Mussolini en 1930, siendo este uno de los sellos inconfundibles del director: elegir un periodo bélico de la historia como escenario para sus películas.
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Un laberinto de madera
El Laberinto del Fauno es otra cinta que transcurre al final de la guerra en 1944, donde la protagonista «Ofelia» utiliza un reloj de arena para contar el tiempo exacto que debe durar una misión ordenada por el Fauno. En Pinocho, el reloj cobra gran relevancia: es utilizado por La Muerte para indicar el tiempo que le queda para volver a la vida.
En la iglesia donde trabaja Geppetto, los vitrales son iguales a los de la catedral de El Laberinto del Fauno. Además, en las vidrieras más pequeñas podemos observar las siluetas del Fauno y El Hombre Pálido.
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La Forma del Agua
En La Forma del Agua, cinta ganadora al Oscar por mejor director y mejor película en 2018, expone una ventana semicircular en el apartamento de «Eliza». Una ventana exactamente igual aparece en el taller de Geppetto.
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Opera prima
La opera prima del querido director «Cronos» también hace aparición por unos segundos en la escena donde la luz entra por orificios en el desván de Geppetto, con Pinocho aprendiendo a usar sus extremidades caminando de forma tétrica y espeluznante.
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Dame un papel, no importa cuál sea
Tras trabajar con Guillermo del Toro en El Callejón de las Almas Perdidas, Cate Blanchett imploro por un papel en Pinocho, pero para ese momento el único personaje libre era el del mono Spazzatura. La actriz no titubeo al aceptar el papel. Cabe mencionar que Spazzatura cuenta con líneas de dialogo que solo contienen sonidos y pequeños alaridos.
Un dato extra, es que el carnaval del Conde Volpe es un espejo al de Nightmare Alley de 2021.
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3D y marionetas gigantes
Todas las marionetas fueron echas a mano a excepto Pinocho, el cual fue realizado mediante una impresora 3D.
Y hablando de marionetas, Pinocho y Sebastián J. Grillo se fabricaron en distintos tamaños, ya que diferentes escenas ameritaban a los personajes más grandes.
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El grillo y la conciencia
Guillermo del Toro hace un homenaje al grillo de la novela original, en la que muere al ser golpeado por Pinocho con un martillo al molestarse con él, prosiguiendo en la historia como un fantasma.
En la película, vemos como el pobre Sebastián sufre muchos infortunios, siendo aplastado por la mayoría de los personajes y casi muriendo a causa de un martillo, que al igual que la conciencia, siempre termina como la más traqueteada.
Al final del filme descubrimos que el grillito narra la historia desde el más allá.
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Charles Dickens
Otro dato que no se nos debe pasar, es que Pinocho guarda a Sebastián J. Grillo en una cajita de fósforos dentro de su pecho, homenajeando a la historia de Charles Dickens “El Grillo en el Hogar”.
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Un niño de verdad y Hellboy
El hada mágica que otorga vida a Pinocho “Wood Sprite” comparte un increíble parecido con «El Ángel de la Muerte» de la saga Hellboy.
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Las tentaciones de Cristo
A lo largo de la cinta encontramos muchas similitudes entre Pinocho y Cristo, por ejemplo, comparándose con él dentro de la iglesia. Pero esta curiosidad va más allá.
Pinocho es sometido a dos de las tres tentaciones que Satanás hace a Cristo (San Mateo, Capitulo 4).
La primera tentación son las golosinas y chocolate caliente que le ofrecen a Pinocho. La segunda es el poder y la fama otorgada por el Conde Volpe, mostrando todos los reinos que este podría quería dominar.
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A falta de burros, mascaras
Uno de los grandes cambios que presenta esta adaptación, es que no muestra La Isla de la Diversión, en lugar de ello hallamos un campo de entrenamiento militar. Y aunque los niños no se transforman en burros, la cinta homenajea a esta escena mediante mascaras de gas, tras ser atacados por bombardeos aéreos, aludiendo a las caras alargadas de burro.
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El muñeco y el monstruo
Guillermo del Toro quería que esta versión de Pinocho fuese una especie de Frankenstein: un ser imperfecto creado a partir de un arrebato de ira por parte de Geppetto. Ambos seres son creados artificialmente pero, a diferencia de Frankestein, Pinocho al final es amado y aceptado por su creador.
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Quince años de planeación
El director Del Toro tardó poco mas de 15 años en realizar este largometraje, ya que, por varios obstáculos, muchas versiones y diferencias con el desarrollo y contraste histórico de la cinta, los productores “se echaban para atrás”. Finalmente, en 2018 anuncio su realización y animo sus marionetas de una forma muy especial, convirtiendo este proyecto en el mas personal de su trayectoria fílmica.
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El niño de verdad
A diferencia de los relatos clásicos, Pinocho no se vuelve «un niño de verdad», en cambio renuncia a su inmortalidad para salvar la vida de Geppeto. Ser «un niño de verdad» no tiene nada que ver con la piel o la madera, sino en el sacrificio a favor de su padre.
